El cannabis

El cannabis procede del cáñamo, originario de Asia. Al principio se utilizaba para fabricar telas. Es una planta que no suele superar los tres metros de altura dependiendo en las circunstancias en las que crezca.

El cáñamos indiano se cultiva tanto en condiciones naturales como artificiales, aunque suele ser más común su cultivo en zonas con temperaturas regulares. El cultivo de esta planta destaca en Asia Oriental, el Norte de África y en América Central; es sorprendente, por ejemplo, que su comercialización en Holanda sea legal y su consumo.

En el mercado ilegal de esta sustancia (en la mayoría de países) se extrae de esta planta la marihuana, formada por las flores de la parte superior de la planta. También se puede extraer el hachís, placas de resina seca, cuyo aspecto es marrón oscuro. El hachís se suele mezclar con tabaco, habiéndolo calentado anteriormente el hachís.

El cuerpo tarda en eliminar una semana aproximadamente las sustancias tóxicas en el hígado, cerebro, pulmones, etcétera, eliminándose por la vía urinaria y fecal.

Las consecuencias del consumo de esta sustancia pueden ser a largo plazo problemas intestinales o respiratorios  u otros problemas que ya resumimos en tipos de drogas.